jueves, abril 21, 2005

Miedos

Estuvo tanto tiempo en soledad que los miedos eran previsibles. Ahora que su vida había cambiado tanto, su ser estaba lleno de inseguridades, terrores, puertas cerradas o que sin quererlo se cerraban incontrolablemente aislando todo su mundo del exterior. Todo lo que siempre había visto en los demás como algo ridículo, enfermo, ilógico, ahora lo creaba todo el tiempo para su realidad.
El asunto era descubrir la forma de terminar con todo lo nuevo y volver al pasado, seguro y conocido. El asunto era crear y creer que todo era mentira, que algo no andaba bien, que el dolor de otro final estaba agazapado a la vuelta del tiempo, esperando para hacer su entrada a escena. El asunto era de una u otra forma, conseguir a toda costa y procurar salir lo más ileso posible, un excusa para que todo se cayera sin dejar el más mínimo rastro.

Escribo porque tengo la vagancia en la boca.