...y la vida siguió...
. . . Palabras Huérfanas . . .
La vida es extraña. Es vueltera. Es chistosa. Y además es muy veloz.
En estos días mi amiga Natalia me avisó que el 9 de diciembre se va a casar y me pidió que sea su madrina. Ella hace muchos años que convive con su marido (digo marido porque no es un simple papel el que da ese "título") y tiene 3 hijitos que son mi debilidad. El día que me llamó y me pidió ser la madrina, la emoción que sentí fue tanta que me temblaba la voz y se me humedecieron los ojos. Entre todas las personas que conoce me consideró tan especial como para pedirme algo tan importante y eso, es simplemente maravilloso.
La vida este año, no dejó de sorprenderme. Se me dió vueltas tantas veces que hay momentos en que no sé muy bien dónde estoy parada y me pasa que pierdo los límites de la realidad y lo onírico.
A veces soy tan discapacitada que lloro y no puedo, ni siquiera, saber por qué.
pasan y yo no tengo ni un segundo como para entrar en mi blog y escribir algo. Ahora escribo esto mientras escucho Sagrada el tema musical de mi amigazo Fernando que me retó dos veces ya, porque no escribía nada.
Yo no sé por qué, pero cada vez corro más y hago menos. El otro día escuché una teoría que dice que el tiempo está muy acelerado y que parece ser que un día de este siglo dura apenas 16 horas, es decir que los días de 24 horas están pasados de moda ya que son de hace 2 siglos.
En lo que va de mi vida, he vivido un sinfin de dolores, físicos, emocionales, mentales, espirituales.
...y según las circunstancias de la vida, uno se encuentra sólo, sólo para afrontar todos y cada uno de los problemas con responsabilidad e intentando salir airoso, sólo para proyectar planes y proyectos para el futuro, sólo a la hora de irse a dormir, sólo para desayunar o para cenar.
Me veo cuando era una niña, callada, concentrada, solitaria, reservada, introvertida.
La sensación es como la de ver la vida pasar por detrás de un vidrio,
Buenas tardes damas y caballeros, vengo hoy a ofrecerles directamente del importador al consumidor, esta fabulosa y magnífica maquinita calculadora de sentires y sentimientos.
Todos tenemos una maquinita calculadora de sentimientos. Algunos le dan poco uso, algunos un poco más y algunos le dan un uso abusivo.
La oscuridad vence a los seres que quieren más que nada ser luces en un firmamento dolorido y delirante.
Los días en que me toca despedirte, los paso anhelando que ese momento no llegue
Necesidades de expresarme de alguna forma para no sentir que algo dentro de mí puede explotar.
"O nosotros somos capaces de destruir con argumentos las ideas contrarias,